Sin rumbo por el octavo mes, a veces todo empieza con una frase, justo cuando sus días se acercan al tres.
Nada parece haber cambiado ahí fuera, que es tanto como confirmar el empeoramiento previsto, cada vez mas tangible, mas cercano.
Me siento bien... y sin embargo, escribo al revés por la extrañeza, la contradicción con el entorno y la desconfianza.
Todo es susceptible al cambio, la capacidad de regenerarse es también propia, intrínseca y particular.
Acercarse al murmullo solidario, adocenarse en él, para que el mundo apetezca. Ejercicios para el mes nueve. Alejar también la inapetencia. Ordenar, siempre toca ordenar en estos días de apacible apariencia mordisqueada... cuando se acerca el tres.
Sin rumbo, por el octavo mes.
¿Y tú?, ¿Como te va?.
Deambulando, sin rumbo también también. Haciendo personal una cuestión genérica que no retórica, que todos vamos deambulando por esta crisis que no cesa.
ResponderEliminarLe has sacado oro a esta foto, no fui yo capaz, aunque me animaré a revisarlas.
¿Has visto a Opari? va a ser muy guapo, casi tanto como Roco en sus mejores tiempos
Si lo he visto, si... que cosa mas guapa.
EliminarQue no os pase nada...je.
¿Ya os deja dormir?.
Mientras el tres podamos seguir trabajando... todo parecerá ir bien, pero hemos de estar alerta a lo que nos traerá el otoño...
ResponderEliminarEstupenda la foto, enmarcando a la chica. Me encanta.
Si es por eso, el otoño ya esta aquí.
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