domingo, 6 de mayo de 2012

Todos los sentidos eran.

Te giras,el aroma te golpea con toda la suavidad acumulada, discretamente... pero te giras, cambias el paso, la dirección y te acercas, te acurrucas y miras... mientras te envuelve. No puedes evitar alargar la mano y rozarla,  el tacto es sedoso, parece que te acaricia mientras tu lo haces. Se mueve a la vez que el sonido de la brisa llega hasta tu oído, acompasado con el sabor a sal cercano... y vuelve a golpearte con su aroma, para volver a empezar de nuevo. Luego intuyes, todo acabará bien... continúa, continúa.


1 comentario:

Tu voz se agradece siempre.