martes, 27 de diciembre de 2011

Del año que dejamos atrás.

Uno crece, con los pasos que da. Atraviesa su propia existencia, encaramándose a saltos sobre los ecos de su reflejo y aprendiendo a través de los espejos, a veces para no olvidar, aunque el deseo sea otro. Escarbando en la arena de la playa con la esperanza de encontrar un trozo de cristal que te permita atravesar los espacios vacíos que quedaron atrás y siguen contigo. No es olvidar, es conseguir comparecer con ellos asumidos y sin carga, feliz de haberlos vivido... y continuar, sembrando de nuevo, recogiendo de nuevo, cosecha tras cosecha de cada nuevo año. ¿Que te voy a contar ahora?.
Seguramente os seguiré encontrando en mi camino, cada vez mas tenues, mas imprecisos... o no. ¿Quien sabe?. Pero estabais ahí y seguiréis estando, de eso estoy seguro.
Así que seguiré sembrando por el puro placer de hacerlo, que es mi forma de seguir amando, mi manera de recordar que estabais aquí... y seguiréis estando. Mi alforja cargada de buenos momentos, que habrá que seguir llenando... mi risa y mi caricia...y la vuestra.
Un brindis al cielo, que es uno de los lugares donde miro a veces para contaros... mis cosas, un brindis de nubes. Por el nuevo año.

2 comentarios:

  1. Brindo por ello Agustín, y por seguir disfrutando de estos momentos que nos ofreces, tan cargados de dulzura y poesía

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  2. Es importante seguir recordando a todos los que han sido importantes para cada uno. Bonito texto para reflexionar sobre el paso del tiempo.

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